Page 108 - Central Romana
P. 108
UN SIGLO DE HISTORIA CENTRAL ROMANA CORPORATION106Zona franca: Cambiar con los tiemposFree trade zones: Changing with the timesUna de las contribuciones más positivas del Central Romana al desarrollo de la economía nacional ha sido su participación en la creación de la primera zona franca del país y la elaboración, junto con técnicos del Gobierno Dominicano, de la Ley No. 299 de Incentivo y Protección Industrial que permitió el posterior desarrollo de dicha actividad en todo el territorio nacional.El surgimiento de las zonas francas obedeció a la preocupación de los ejecutivos del Central Romana por la escasez de fuentes de empleos en la región este, lo cual provocaba una presión laboral sobre la empresa azucarera, principal empleador de esa región. Por estas razones, don Eduardo Montalvo, alto ejecutivo de la empresa, y el consultor de origen cubano Joaquín Martínez, que había sido Presidente del Banco Central de Cuba, sugirieron la creación de industrias de alto contenido de mano de obra, con fines de exportación hacia el mercado norteamericano. Se aprovechó también la situación en Puerto Rico, donde la operación de algunas ramas de producción se estaban haciendo poco rentables por los altos niveles salariales que se pagaban en esa isla, a causa del alto grado de desarrollo que habían alcanzado.En octubre de 1969, se instaló en la zona franca de La Romana la primera empresa, Delta Brush, que en ese entonces era la compañía de pinceles más grande del mundo. Posteriormente, se integró Carrier y Consolidated Cigar. Esta última se constituyó en la base para el posterior desarrollo de la fabricación de cigarros en la República Dominicana. Esta planta procesadora, que opera actualmente bajo el nombre de Tabacalera de García, C. por A., ha seguido por más de 30 años produciendo cigarros de la mejor calidad internacional, y sigue siendo la unidad de producción de cigarros, bajo un mismo techo, más grande del mundo.One of the most positive contributions of Central Romana to the development of the national economy has been its participation in creating the first free trade zone in the country, and the elaboration, together with technicians from the Dominican Government, of Law No. 299 on Industrial Protection and Development, which allowed the subsequent development of this activity in the entire country.The emergence of free trade zones followed the concerns from Central Romana‘s executives, regarding the shortage of sources of employment in the eastern region, which was causing labor pressures on the sugar industry, the main employer in this region. For these reasons, Eduardo Montalvo, top executive in the company, and Joaquín Martínez, a consultant of Cuban origin who had been President of the Central Bank in Cuba, suggested the creation of manufacturing industries requiring skilled manual labor whose products are exported to the U.S. market. They also took advantage of the situation in Puerto Rico, where the operation of certain branches of production were becoming less profitable because of the high wages being paid in that island due to the high level of development they had achieved.In October of 1969, Delta Brush, largest paintbrush company in the world at the time, became the first company to establish itself in the free trade zone in La Romana. Later, Carrier and Consolidated Cigar joined the ranks. The latter became the base for the subsequent development of cigar manufacturing in the Dominican Republic. This processing plant, which now operates under the name Tabacalera de García, C. por A., has, for more than 30 years, continuously produced cigars of the highest international quality, and continues to be the largest cigar manufacturing unit, under one roof, in the world.ff